Stop Motion



El stop motion, parada de imagen, paso de manivela, foto a foto o cuadro por cuadro es una técnica de animación que consiste en aparentar el movimiento de objetos estáticos por medio de una serie de imágenes fijas sucesivas. En general se denomina animaciones de stop motion a las que no entran en la categoría de dibujo animado, ni en la animación por ordenador; esto es, que no fueron dibujadas ni pintadas, sino que fueron creadas tomando imágenes de la realidad. que consiste en unir fotogramas para generar la ilusión de que lo que está dentro del plano se mueve.

La fluidez del movimiento, dependerá de cuantas fotos utilicemos por segundo, además de qué tan precisos sean los movimientos. Mientras más minuciosos sean los cambios  de las posturas del personaje o de los elementos que queremos que muestren movimiento y por lo tanto, obtengamos más fotos  por segundo, el movimiento será mucho más fluído.

 

Hay dos grandes grupos de animaciones stop motion: la animación con plastilina o cualquier otro material maleable, llamada en inglés claymation, y las animaciones utilizando objetos rígidos.
También esta el go-motion que es un sistema de control que permite a miniaturas y cámara, realizar movimientos mientras se utiliza la animación fotograma a fotograma o stop-motion .

La animación con plastilina puede hacerse al "estilo libre", cuando las figuras se van transformando en el progreso de la animación. Puede también orientarse a personajes, que mantienen una figura consistente en el transcurso de la película.

Las primeras producciones 


 Una de las primeras películas de animación con plastilina fue un modelado extraordinario que deslumbró al público en 1912. En 1916 se estrenó el primero de 54 episodios de “Los milagros en el barro” de Willie Hopkins en la pantalla grande. También en diciembre de 1916, primera mujer animadora, Helena Smith Dayton, comenzó a experimentar con Stop Motion en arcilla. Ella estrenará su primera película en 1917, una adaptación de William Shakespeare’s Romeo y Julieta. 

En el cambio de siglo, hubo otro animador muy conocido. Willis O’Brien (conocido por otros como O’bie). Se conoce su trabajo en “El mundo perdido” de 1925, pero es más admirado por su trabajo en King Kong, un hito del cine mundial que fué posible gracias a la animación Stop Motion.